La charcutería es mucho más que jamón, salami o prosciutto: es una tradición ancestral, una técnica de conservación y un verdadero arte gastronómico.
Sus orígenes se remontan a miles de años atrás, cuando el ser humano buscaba preservar la carne antes de que existiera la refrigeración.
Un origen práctico… que se volvió delicioso
La palabra “charcutería” proviene del francés charcuterie, que significa “productos de carne cocida o curada”.
Desde el Imperio Romano hasta la Edad Media, distintas culturas desarrollaron formas de curar, salar, ahumar o fermentar carnes, no solo para conservarlas, sino también para darles un sabor único.
Qué hace especial a la charcutería?
- Curado natural: se emplean sal, especias, humo o fermentación para prolongar la vida útil sin aditivos industriales.
- Desarrollo de sabores: los procesos largos y controlados realzan los sabores umami, ahumados y especiados.
- Diversidad regional: cada país tiene sus joyas: jamón ibérico en España, mortadela en Italia, saucisson en Francia, bratwurst en Alemania.
Y qué tiene que ver Guttor con todo esto?
En Guttor, la charcutería no es un simple relleno: es uno de los pilares de nuestra propuesta. Elegimos ingredientes que respetan los procesos tradicionales, con origen europeo certificado y una trazabilidad clara. Cada lonja que usamos refleja un compromiso con la calidad, no solo por su sabor, sino por el respeto al oficio detrás de su elaboración. No usamos “cualquier jamón”, sino charcutería con historia, técnica y carácter. Creemos firmemente que lo mejor del mundo sí puede caber en un baguette... cuando se hace con criterio.
Más que ingredientes, cultura gastronómica
Cada rebanada de charcutería representa una historia milenaria. En Guttor, la combinamos con pan de masa madre, quesos de alta gama y vegetales frescos para crear una experiencia completa, no solo un alimento. Nuestro enfoque va más allá del producto: queremos que cada bocado sea una forma accesible de acercarse a lo mejor de la gastronomía mundial. Porque no hacemos comida rápida. Hacemos buena comida, rápido. Y eso también es un arte.